Por Andrea Maturo. Directora de Artout Argentina
En Los Cuatro Elementos, Heloisa Soriano Ávila propone algo poco frecuente: detener el tiempo. Sus ilustraciones no buscan el impacto inmediato ni la grandilocuencia simbólica; prefieren el susurro, la sugerencia, la emoción que se despliega lentamente. Allí donde muchos artistas jóvenes se apresuran a demostrar destreza, Heloisa elige escuchar. Y ese gesto —silencioso pero firme— es, quizás, su mayor fortaleza.
La serie se construye desde fondos etéreos, casi evaporados, donde la materia parece disolverse para dar lugar a lo sensible. En ese espacio suspendido emergen figuras definidas por trazos seguros, decididos, que revelan una intuición visual madura. Hay equilibrio entre lo liviano y lo contundente, entre lo que flota y lo que ancla. Tierra, agua, aire y fuego no aparecen como arquetipos cerrados, sino como presencias emocionales: la tierra respira ternura, el agua murmura memoria, el aire se mueve con libertad y el fuego conserva un misterio íntimo, contenido.
El conjunto funciona como una fábula sin palabras. Cada obra es autónoma, pero todas dialogan entre sí, como capítulos de un relato que no se escribe con letras sino con color, ritmo y silencio. No es casual: Heloisa también es escritora. En sus imágenes hay cadencia, metáfora, pausas. Cada trazo parece una frase suspendida; cada color, un verso que ilumina lo invisible. Su lenguaje visual se nutre de la poesía y la devuelve transformada en imagen.
Que esta sea su primera muestra individual no implica un inicio, sino una síntesis. Con apenas 14 años, Heloisa cuenta con una trayectoria que da cuenta de una vocación temprana y sostenida. Formada desde pequeña en talleres de arte, creció inmersa en espacios creativos y expositivos, especialmente en el barrio de La Boca, un territorio donde el color, la historia y el arte conviven como una forma de identidad. Ese entorno dejó una huella visible en su sensibilidad y en su manera de concebir la imagen como relato.
Su recorrido incluye participaciones en exposiciones nacionales e internacionales desde la infancia: Deseos de Navidad (2018 y 2019), El Mundo de Dana Laila en México (2021), la muestra colectiva Sin Etiquetas por la inclusión, y la Exposición Internacional de Arte en la Biblioteca Popular Monte Chingolo (2022). En 2025 integró Arte, Mujeres y Vino en Buenos Aires, sumando su voz a un diálogo intergeneracional. A esto se suma su participación literaria en antologías infantiles y juveniles de alcance internacional, donde su poesía refuerza la coherencia entre palabra e imagen que atraviesa toda su obra.
Durante la pandemia, lejos de replegarse, Heloisa amplió su universo creativo a través de su canal de YouTube Helo Artista, desde donde compartió saberes, impulsó desafíos colectivos y generó espacios de acompañamiento creativo para niños y jóvenes. Allí, el arte apareció no solo como expresión, sino como acto de comunidad. En esa misma línea, su obra MALVINAS, realizada con técnica de fileteado porteño, fue donada en 2021 al Centro de Veteranos de Guerra de Malvinas de Lanús, gesto que confirma un compromiso sensible con la memoria y el territorio.
La serie Los Cuatro Elementos fue presentada el pasado 14 de noviembre en el Rotary Club de Remedios de Escalada, en una muestra organizada por Multimedios La Idea, bajo la dirección de Pablo Corcuera. El encuentro reunió arte, comunidad y sensibilidad, consolidando un espacio de visibilidad para nuevas voces y reafirmando la importancia de generar ámbitos culturales donde el talento joven pueda desplegarse con respeto y profundidad.
Los Cuatro Elementos no es solo una serie ilustrada: es una declaración poética. Heloisa Soriano Ávila nos recuerda que el arte puede ser un puente entre lo real y lo mágico, entre la mirada y la palabra, entre la infancia y una lucidez que no necesita perder ternura para ser profunda. En tiempos de ruido y velocidad, su obra invita a volver a creer en la belleza sencilla y en la potencia transformadora de imaginar.
